Llevar una alimentación saludable es muy importante para tener una buena salud.
Seguro que esta frase la has oído millones de veces. Y es que es verdad. Nuestros hábitos a la hora de alimentarnos determinan en gran medida el funcionamiento de nuestro organismo.
Una buena alimentación es la que nos proporciona los requerimientos del organismo. Es decir, los alimentos que nos aportan energía y nutrientes para cubrir nuestras necesidades y que el organismo pueda funcionar correctamente.
Hoy en día, tenemos la suerte de tener a nuestra disposición una gran variedad de alimentos para llevar una dieta y alimentación saludable. Pero, ¿por qué no nos comemos bien? ¿Por desconocimiento? ¿Por nuestro ritmo de vida?
Consejos alimentación saludable
- Come fruta y verdura a diario
- Establece horarios de comida
- Mastica lentamente
- Consume cereales integrales
- Ingiere proteínas de calidad
- Grasas saludables
- Reduce la ingesta de sal
- Intenta reducir o eliminar el azúcar en los alimentos
- Bebe agua
- Intenta comer comida fresca
Clínica David Marcos – Nutrición
Pero, si realmente quieres y necesitas cambiar tus hábitos alimenticios y apostar por una alimentación saludable… en Clínica David Marcos te ayudamos.
Mediante la educación nutricional, trabajamos para mejorar los hábitos alimentarios, y de este modo conseguiremos mejorar la salud y la calidad de vida.
No trabajamos con productos ni complementos, trabajamos con comida real y con pautas personalizadas, adaptadas tanto a tu estado de salud como a tu estilo de vida, tus gustos y preferencias.
No buscamos resultados a corto plazo, buscamos un cambio de hábitos que te permita conseguir un estilo de vida saludable para siempre, para que nunca más tengas que hacer dieta.
La clave del éxito está en ser flexible, en aprender a compaginar un estilo de vida saludable con tu día a día, con tu vida social, y nosotros podemos ayudarte a conseguirlo mediante un plan nutricional fácil y cómodo de seguir.
¿En qué nos diferenciamos?
Nuestra nutricionista no solo te dará una dieta y ya está, sino que su objetivo va más allá. Trabaja la educación nutricional y los planes de alimentación saludable totalmente personalizados. Intenta dar un trato cercano, escuchando al paciente y poniéndose en su lugar, para saber qué piensa y qué siente en cada momento para poder hacer de este proceso de cambio un proceso en el que se sientan acogidos, comprendidos y caminar juntos de la mano.
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